Sin empleo y sin dinero, usó todo lo que tenía para inventarse un negocio. Pese al esfuerzo y las dificultades, Brígida se agradece a sí misma y celebra trabajar como independiente. Brígida se siente mucho mejor sin la presión y la violencia con la que la recibían en otros trabajos. La historia de Brígida es algo excepcional. En Bolivia, nueve de cada 10 personas trans no recibe ningún salario fijo.
Brígida Ajata, imágenes de Muy Waso.